domingo, 28 de junio de 2009

Las bibliotecas más bellas de Occidente de Ahmet Ertug

Fotografía y entrevista


(Fotos : Ahmet Ertug/Biblioteca Trinity Colleqe, Dublín)

'Las bibliotecas antiguas poseen un alma'
Ahmet Ertug ha fotografiado estos templos de letras en numerosas ciudades, ahora su obra se expone en la Biblioteca Nacional de París hasta el 12 de julio

La Biblioteca Nacional de París expone hasta el 12 de julio una serie de fotografías de las bibliotecas más bellas de Occidente, algunas de las cuales ofrecen un lujo y magnificencia digna de los grandes palacios. De Oxford a Dublín pasando por Salamanca, el fotógrafo turco Ahmet Ertug ha visitado estos enclaves rebosantes de literatura.


Usted se formó como arquitecto. ¿Cuál fue el camino que le llevó a la fotografía?

De 1969 a 1974 estudié Arquitectura en la Association School of Architecture de Londres. Vivía cerca del British Museum y el camino más corto para ir a la escuela era atravesar esas galerías interminables. Se me abrió un espacio que comencé a explorar, y seguramente esos largos paseos matinales fueron la base de mi educación visual. Me compré una Nikon F2 a plazos y empecé a fotografiar en blanco y negro edificios históricos, demoliciones y obras en construcción.

(Biblioteca Angélica de Roma)

Cuando me diplomé como arquitecto, mi primer trabajo serio fue en Irán. Atravesé todo el país fotografiando bazares y monumentos. Pero el verdadero compromiso con la fotografía comenzó en 1979, cuando recibí una beca para vivir y trabajar un año en Japón. Fue así como me especialicé en la foto de arquitectura y he publicado unos 25 libros.

¿Con qué criterios eligió las bibliotecas que figuran en la exposición?

Según su ubicación, sus cualidades arquitectónicas y la belleza de sus colecciones. La de Austria, por ejemplo, es verdaderamente extraordinaria. Al comienzo las bibliotecas estaban en los monasterios, eran lugares secretos, pero gracias al profesor Friedrich Krinzinger tuvimos la posibilidad de acceder a esas bibliotecas. En una ocasión estaba fotografiando la antigua biblioteca de la Universidad de Salamanca, habíamos hecho la foto, y las bibliotecarias me dijeron que había una cámara de seguridad que deseaban mostrarme. Era realmente fabulosa, había armarios repletos de libros antiguos... Fotografiarla fue extraordinario.
'Las bibliotecas antiguas poseen un alma'

(Biblioteca de la abadía de d’Admont, Austria)

Para usted, ¿en qué se diferencian las bibliotecas actuales de las antiguas?

Comparadas con las bibliotecas modernas, donde los libros están en el depósito y los lectores no pueden verlos ni, menos aún, tocarlos, las antiguas son totalmente diferentes: poseen un alma. Yo lo comparo con el acto de comprar libros. Antes los comprábamos en una librería y hoy en Internet. Tocar los libros, hojearlos y tenerlos entre las manos, confiere un placer único a la lectura. Me gusta sumergirme con mi cámara fotográfica en esos espacios arquitectónicos extraordinarios, que son las bibliotecas antiguas, donde el tiempo transcurre lentamente.

¿Qué material utilizó para realizar esas fotografías?

Desde hace años utilizo una cámara con chasis 20 x 25. La calidad de este formato supera a las cámaras digitales disponibles; la calidad de la película deja mayores posibilidades al fotógrafo: me libera del ordenador y puedo concentrarme sobre el tema. Es difícil, pero realmente vale la pena. Utilizo solamente la luz natural con largos tiempos de exposición. A veces dos e incluso cinco minutos para captar los detalles más oscuros, sólo con luz natural.

(Bibliotaca Nacional de la Republica Checa)

¿Esta exposición será exhibida en otras ciudades europeas?

La Biblioteca Nacional de Francia ha recomendado la exposición a la Biblioteca Nacional de España, para un encuentro mundial de bibliotecarios. Espero que sea así.

¿Algún proyecto en curso?
Sí, estoy trabajando sobre un libro y una exposición sobre los teatros líricos europeos. Espero fotografiar el Gran Teatro del Liceo y el Palau de la música.


Gracias:
Orlando Torricelli París
♪♪♪♪♪

1 comentario:

ciudadesenconstrucción dijo...

Por alguna remota reminiscencia este blog me lleva hasta la Biblioteca de Babel del argentino Jorge Luis Borges. Un lugar especial.